¿Te ha pasado que alguien te pide presupuesto y luego desaparece más rápido que tus hijos cuando dices “¡a recoger!”?
O peor aún: te contrata, pero te desgasta el triple de lo que paga… (osea, un cliente tóxico)
Tranquila, no estás sola.
A todas nos ha pasado. Y muchas veces no es tu culpa: es la estrategia, la visibilidad y el mindset lo que marca la diferencia.
Hoy te traigo estrategias prácticas para que tu negocio digital deje de ser invisible y empiece a atraer clientes reales, sin sentir que vendes tu alma ni tus horas libres.
1. Las clientas ideales no aparecen… se atraen
Primero: define tu propuesta de valor y quién es tu cliente ideal.
Hazlo con claridad: ¿qué problemas resuelves? ¿qué transformación ofreces?
Si tú lo tienes claro, ellas también lo tendrán.
Ejemplo de alumna Triple M: pasó de decir “hago un poco de todo” a “ayudo a emprendedoras del sector sanitario a organizar su negocio sin estrés y disfrutar de su proceso”.
Resultado: clientas que conectan y repiten.
2. Networking con intención
El networking real no es repartir tarjetas o enviar mensajes fríos.
Es conectar desde la autenticidad y aportar valor antes de pedir.
Pasos sencillos:
Empieza por lo cercano: antiguos contactos, compañeros de cursos, grupos donde ya participas (y la puerta del cole, en serio).
Sé activa: comenta, comparte, ayuda.
Cultiva relaciones: un café virtual, un mensaje de seguimiento, una recomendación sincera.
Recuerda: cada pequeño gesto construye vínculos que, a largo plazo, se traducen en oportunidades de negocio.
3. Microcontenidos que te hagan visible
No necesitas un plan de marketing de 20 páginas.
Pequeñas acciones constantes marcan la diferencia:
Historias mostrando tu día a día como emprendedora digital.
Mini tips prácticos en reels de 30 segundos.
Testimonios reales de clientas satisfechas.
La consistencia supera a la perfección. Y sí, tu comunidad conecta con lo humano, no con lo pulido.

4. Valórate primero
Si no crees en tu trabajo, nadie más lo hará.
Define tarifas justas, reconoce tu talento y di adiós a los “clientes tóxicos” que no valoran tu tiempo.
El mindset correcto es el primer paso para atraer a las clientas que SÍ.
Confía: cuando tú te conviertes en la profesional que sí, las clientas correctas aparecerán.
5. Caso real: de la inseguridad a clientes que pagan
Lucía, otra de nuestras girasoles, empezó diciendo:
“No sé venderme y siento que nadie me necesita”.
Tras 2 meses en Club Triple M, ajustó su propuesta de valor, creó microcontenidos y practicó networking con intención.
Hoy, trabaja con clientas que valoran su tiempo y talento.

Ser visible no es cuestión de suerte: es estrategia, constancia y conexión.
En Club Triple M, acompañamos a madres emprendedoras digitales a marcar su hoja de ruta, definir su propuesta y atraer clientes reales.
Prueba un mes y descubre cómo nuestras girasoles ya están logrando resultados sin estrés ni culpa.
👉 Únete hoy y empieza a atraer a tus clientas ideales:
https://www.mentoriatriplem.com/clubtriplem
Te espero al otro lado,
Sylvia 🌻
Triple M: Más acompañada--->Más segura--->Más profesional
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